Santiago Capitán Abencerraje

Marcha Mora

El compositor  Saúl Gómez Soler escribe una marcha mora  a petición del capitán moro “Santiago Capitán Abencerraje”  para la presentación de su capitanía y sus desfiles por las calles de Alcoy, de los coros se hace cargo con mucho entusiasmo  y empeño el Cor Ciutat de Burjassot

El compromiso del coro en el proyecto es, el sábado 18 de marzo por la tarde grabación de la obra y a última  hora el acto de presentación del capitán, un macro espectáculo donde  no falto de nada, tengo que reconocer que jamás vi cosa igual, nosotros interpretaríamos la marcha mora escrita y estrenada para tan memorable momento    

Experiencia inolvidable para muchos de nosotros, ya se comenta que habrá un antes y un después para los participantes del coro.

 Comienza la aventura, a primera hora de la tarde, en la mente de casi todos nosotros estaba la idea de pasarlo bien y  yo creo que al menos por mi parte  se cumplieron ampliamente los objetivos marcados, cantar y divertirse.

Confieso que tengo fobia a los autobuses, pero a pesar de ello me tome una Biodramina  me metí en el bus y a Alcoy que me fui.

El viaje que tanto temía se me hizo corto, el bus rebosaba de alegría e ilusión por parte de todos los componentes. Apenas habíamos salido de Valencia, cuando el amigo zamorano (cual “azafato”) pasó sirviéndonos un chupito de orujo zamorano, es un brebaje que despierta a los muertos. Mientras el vehículo se deslizaba por la autopista cumpliendo con su obligación de hacer kilómetros, nosotros cumplíamos con la nuestra de estudiar, todos partitura en mano con la marcha mora, que tendríamos que grabar nada más llegar, cada cual a su aire, unos solfeando, otros leyendo la letra, los más previsores llevábamos la música en mp3 y poníamos la voz, donde y cuando tocaba, o no.

A mitad de camino, el zamorano, pasa de nuevo repartiendo, a todos menos al conductor por razones obvias y a mí por esa tontería que tengo de no querer tomar alcohol (yo habría preferido agua, para los que no lo sepan la Biodramina da  sequedad y estaba muerta de sed) como decía para esta segunda ronda elige algo más acorde con el momento y la situación, sirve “licor-café”, con la copa en la mano, continuamos con la labor de aprender la marcha mora “Santiago Capitán Abencerraje” los que habíamos conseguido aprenderla,  hacíamos esfuerzos para no olvidarla debido al follón de voces distintas que se oían, en teoría cantábamos todos lo mismo, lo malo es que cada uno repasaba el compás en el cual tenía dudas y las dudas no eran coincidentes con los otros, el caos era similar al que se produce cuando en una procesión de hormigas pones un obstáculo, que siguen andando pero cada una por un lado.

El conductor del vehículo es un Santo, a él no le dan licorcito, ni partitura, no tiene ni idea de cómo suena la canción, solo conoce fragmentos sueltos y mezclados que ha escuchado repetidamente durante dos horas y sin una queja.

De esa guisa y arrasando entramos en Alcoy acompañados de una inmensa lluvia, que para nada tenía que ver con los cantos del autocar. Llegamos tarde, con prisa pero muy contentos el licor-café lo puede todo, yo muerta de sed.
Entramos en el teatro como si hubiera un incendio, nos esperaban impacientes, ya estaban preparados para grabar pero nosotros nos habíamos dejado el sentido común en el autobús y necesitábamos unos minutillos para recuperarlo, yo tenía la boca seca y necesitaba agua para poder cantar, pero no había tiempo para tonterías tocaba grabar fuera como fuera.

 Estaba previsto hacer una prueba acústica previa a la grabación, pero no teníamos tiempo, comenzó la música, entró el coro y un cuerpo de danza que nos sorprendió a todos, incluyendo al técnico de sonido que protestó ¡fuera! porque las danzarinas hacían ruido al bailar y no se podía grabar el caso es que nadie les había dicho que estábamos grabando. Las lindas moritas se apartaron a un lado en silencio y comenzó la grabación de nuevo, con la advertencia de que solo se haría una vez ya que el público estaba en la calle esperando para entrar y llovía a cántaros. Comenzamos a cantar y terminamos felizmente, pero a las danzarinas nadie le había dicho que al final de una grabación tiene que haber unos segundos de silencio y como a ellas les gustó mucho, aplaudieron como es lo normal y les cayó otra bronca.

Los pocos minutos que nos dieron mientras entraba el público, los dedicamos a consolar a las pobres odaliscas que no eran culpables de que nadie les hubiera explicado el protocolo.

A continuación un magnifico concierto instrumental ofrecido por Saúl Gómez Soler para terminar todos juntos músicos danzarinas y coro interpretamos por primera vez ante el público la obra “Santiago Capitán Abencerraje”

Aún quedaban varias horas de diversión, al término del concierto nos ofreció el Capitán moro a todos los participantes un gran cóctel, exuberante como la propia fiesta, había de todo, de todo menos agua, mi prioridad era conseguir agua, agua potable, que de la otra en la calle seguía cayendo a cubos.

Ya con mi botellita de agua en la mano me dedique a los canapés, durante la cena la banda no dejo de tocar marchas moras, ente bocado y bocado, se formaban espontáneamente escuadra moros, que se movían al ritmo de la música, nosotros mirando cómo se divertían ellos. En la cena no eran requeridos nuestros cantos y nosotros estamos acostumbrados a celebrar cantando, por eso, regresamos al autobús con muchísimas ganas de cantar y cantamos “de too” (pobre conductor).

 Como ya no tenía objeto seguir con la marcha mora, que dicho sea de paso, ya estaba bien, nos fuimos por algo más clásico, un repaso al concierto del día siguiente, “Misa Brevis De Gounod”. Cuando íbamos por el “Agnus Dei” se oye una vos desde el fondo del autobús que dice, ¡cómo nos pillaran ahora los moros cantando esto, nos iban a dar hasta en el carné de identidad!

Así entre risas y cantos llegamos a Valencia a las cuatro de la mañana.

Hoy domingo los que no nos dejamos la voz en Alcoy, pudimos cantar en el concierto “Misa Brevis De Gounod”